Frostgrave - The Keep a 3 jugadores

 Ayer por la noche nos juntamos Edgar, Kike y yo para jugar. Como Nacho era baja, pausamos la campaña Luz Ardiente de Exploradores de las Profundidades Sombrías para jugar a Frostgrave. Edgar jugaba con su nigromante de nivel 11, Kike se estrenaba en el juego con un brujo, y yo reinicialicé mi banda del ilusionista Cecilius cambiando algún conjuro.

La mesa al inicio de la partida

 La peculiaridad del escenario es que hay cuatro portales de teletransporte formando una cruz alrededor del centro de la mesa. Sobre cada uno de ellos hay un marcador de tesoro, y al acabar una acción de movimiento sobre ellos, la miniatura tiene que realizar una tirada para ver si se mantiene sobre el portal o si se teletransporta a otro. El tesoro principal estaba en el centro de la mesa, como es habitual, y Kike y Edgar colocaron un tesoro cerca de su punto de salida. Yo me quedé sin poder colocarlo.

 Para compensar la diferencia de niveles, Kike y yo ganamos una criatura de nivel de encuentro 1. Kike una rata gigante, y yo un todo poderoso oso que, además, apareció en mi lado de la mesa (es la miniatura del jabalí). Además los conjuros de inicio de partida Soldado Ilusorio y Levantar Zombi funcionaron, ¡con lo que empecé la partida con 13 miniaturas! No logré lanzar Revelar Secreto.

Primer turno de Kike en Frostgrave

 A pesar de colocar en último lugar, tuve suerte y desde el primer turno tuve en línea de visión un tesoro sobre un portal, y el central en lo alto del edificio del centro de la mesa.

 Mi estrategia fue abusar del conjuro de Transponer y mantener alejados a los enemigos mediante Muros de Niebla y Empujones telepáticos. Por los pelos me hice con el tesoro central, Edgar se quedó a una pulgada con un ladrón que su nigromante hizo Saltar hacia el tesoro, y Kike lo tuvo a tiro para moverlo con Telequinesis, pero este conjuro no afecta al tesoro central. Poco después, también me hice con el tesoro del portal más cercano.

Mis chicos corriendo hacia los tesoros

Ladrona con tesoro preparada para transponerse

 Mientras tanto, Kike lanzó a su jauría de perros hacia los soldados de Edgar, que se acercaba con la mitad de su banda hacia el tesoro central, y con la otra hacia el tesoro del portal más cercano.

La jauría de Kike avanzando hacia Edgar

 

Un vikingo cerrando el paso a una araña
gigante que no se ve en la foto

 Pronto Kike aseguró uno de los tesoros de su lado, mientras su banda y la de Edgar se debilitaban luchando, con lo que cambié la idea inicial de huir con dos tesoros y aproveché la situación para acercarme al portal al que se dirigía la segunda mitad de la banda de Edgar, la que no estaba entretenida matándose con la de Kike.

La jauría de Kike peleando con los esqueletos de Edgar

Mientras tanto, los míos acercándose al tesoro
del portal tras el edificio, cerca de los de Edgar

 Protegí a la banda de los ataques a distancia del nigromante con un muro de niebla, mientras los vikingos aparecían detrás de él corriendo hacia el tesoro. Me costó mucho conseguirlo. El nigromante de Edgar estaba muy subido, tenía Combate 7 estaba muy cerca del portal acompañado de cuatro miniaturas más. Pero tras unos 8 intentos lo logré y abandoné la mesa con el tesoro central y dos tesoros más, con solo dos bajas de matones.

¡Huyendo cargados de tesoros!

 Kike abanonó la mesa con 3 tesoros y prácticamente toda la jauría eliminada, pero la peor parte se la llevó Edgar, quien acabó la partida solo con 4 miniaturas sobre la mesa y el aprendiz fuera de combate tras el ataque de un Gusano Gigante que se unió a la fiesta.

 Todavía tengo que hacer las tiradas de tesoro y las subidas de nivel (300 puntos de experiencia. Kike 280 y Edgar algo menos, no recuerdo exactamente).

 La partida me pareció realmente emocionante y divertida. Los conjuros del ilusionista me encantan y creo que ejerce un buen control de la mesa. Lo malo, por citar algo, es que tardamos unas 3 horas. Todavía nos falta rodaje para poder hacer partidas más rápidos.