Frostgrave, The Big Score

 El número 5 de la revista Spellcaster presenta unas reglas opcionales de Frostgrave para extraer de las criaturas no controladas, componentes de conjuros, de pociones, o simplemente partes valiosas en el mercado. También introduce un valor de puntos de experiencia diferente para cada tipo de monstruo aparecido en las expansiones publicadas a este ese momento. Además, incluye dos nuevos soldados legendarios (sus reglas aparecen en el número 4 de la misma revista) el maestro de pociones, y el cazador de monstruos. Para este último nos viene un escenario en solitario de regalo. No está mal ¿no?

Trigareous, buscando una presa desde su atalaya

 El escenario se llama The Big Score, y solo controlamos a un cazador de tesoros y a dos soldados más, con un valor sumado de hasta 125 monedas. Para la partida, acompañé al cazador de una ranger y un matón. En el escenario, los héroes empiezan en el centro de la mesa y tienen seis marcadores de trampa para repartir por ella. Las trampas son de tres tipos, se decide en el momento de su activación (cuando una criatura no controlada pasa a 1" de los marcadores), y como mucho, solo puede haber 2 de cada tipo (básicamente son de mucho ataque, de poco ataque pero +10 al daño, y una red paralizadora).

Despliegue inicial

 Tras colocar a los héroes, se decide al azar la esquina por donde sale Trigareous, un dragón joven herido recientemente. A efectos prácticos, el dragón está cojo y solo mueve 4" (los dragones aparecen en la revista Spellcaster número 2). Luego se tira en una tabla para ver qué dos criaturas aparecen en otras dos esquinas diferentes. A partir de ahí, cada final de turno se vuelve a tirar en la misma tabla para determinar qué nueva criatura aparecerá y en qué esquina. Las criaturas candidatas son esqueletos, esqueletos acorazados, zombis, necrófagos y lobos.

El inexorable avance de Trigareous

 En las fotos se ven algunos marcadores redondos con un signo azul, son las trampas. Mi intención era la de debilitar con el cazador de monstruos y el ranger disparando al dragón, e impedir que se acercaran las otras criaturas desde la plataforma elevada del centro de la mesa. Mientras tanto, el matón haría de picador intentando atraer a Trigareous a las trampas.

Un necrófago en plena escalada

El matón conduciendo al dragón hacia una trampa

 La ejecución de la estrategia fue buena, pero las tiradas de las trampas muy malas. En total se dispararon 4 trampas, al menos dos sobre el dragón, pero ninguna logró ni tan siquiera una rozadura, y poco a poco, el matón se quedaba sin terreno por dónde correr.

Las trampas, como si no estuvieran...

 Finalmente, las criaturas lograron subir a la atalaya por ambos lados, mientras que el dragón acabó con el valiente matón. Poco después, la ranger sucumbió ante las fauces de un lobo y el cazador de monstruos se quedó más solo que la una.

Pintaban magras para el cazador

 Con el dragón encima y rodeado, el cazador tuvo su momento de gloria hiriendo al gusano con un 20 natural (por desgracia, estos bichos son inmunes a críticos) y se pudo desembarazar de la bestia, pero caer de la sartén al fuego. Finalmente, sucumbió ante las garras del poderoso Trigareous.

El cazador pudo con el necrófago y el lobo...

... pero acabar con Trigareous ya era otra historia...

 Tengo que decir que el cazador iba armado de una ballesta y olvidé sumar el +2 al daño la única vez que logró impactar al dragón. Esto hubiera cambiado algo las cosas, ya que tras el 20 natural que he mencionado, el dragón hubiera quedado herido con 4 puntos de vida, una sola acción y -2 a todas las tiradas, con lo que, tal vez, el cazador se hubiera salvado. Pero eso es ya otra historia...

Todo acaba como empieza...